En la víspera de la candelaria y siguiente una antiquísima tradición no desaparecida, los vecinos de Villamayor de Calatrava revivieron el pasado lunes por la tarde sus tradicionales candelicios, denominación derivada de candela, luz, que justifica la gran hoguera que prepara el ayuntamiento y en torno a la cual se reúnen los vecinos, de todas las edades, tras haber escuchado los cencerros por las calles del pueblo, convocando a la fiesta.
Las Amas de Casa montaron sus mesas para ofrecer a todos y de forma gratuita, chocolate y bollería del pueblo, que sufraga el ayuntamiento, cuando ya, caída la noche, la hoguera llegaba a lo más alto.
El alcalde, Juan Antonio Callejas y todos los concejales de su equipo asistieron al acto, así como al segundo candelicio, que al igual que el año pasado organizaron los vecinos de uno de los barrios del pueblo, ofreciendo igualmente dulces y bebidas a los asistentes, que recordaban cuando, hace ya unas décadas, se hacían todavía hogueras en cada uno de los barrios de esta pequeña localidad de 600 vecinos.
Villamayor ha celebrado desde siempre esta festividad, en la víspera de la popularmente denominada candelaria, fiesta de la Presentación del Señor en el templo a los 40 días de nacer y de donde se supone que viene la denominación de Candelicios en Villamayor de Calatrava.