El Gobierno Page suspende el primer curso en Educación y debe recuperar en el verano

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Oretania de Cultura

;ercedes Gómez es Secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO CLM Mercedes Gómez, Secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO CLM · El primer año de Gobierno del PSOE que acaba de cumplirse no ha supuesto apenas cambios en lo que respecta a Educación, materia en la que el Ejecutivo de Emiliano García-Page ‘no ha progresado adecuadamente’ y ha defraudado las grandes esperanzas que el profesorado y la comunidad educativa tenían depositadas en el cambio.

Bien es verdad los elementos fundamentales del curso 2015-2016, que es el primero que ha gestionado el nuevo Gobierno –techo de gasto, ratios de alumnos por aula, horario del profesorado, tasa de reposición, etc.- los dejó diseñados y dispuestos la anterior Administración del PP; pero no es menos cierto que, hasta la fecha, no hay avances significativos en la reversión de los recortes ejecutados y en la recuperación de los derechos arrebatados por el anterior Gobierno de Cospedal.

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Fuimos pacientes en el primer trimestre dando el margen razonable para que el nuevo equipo de la Consejería elaborara y nos presentara un plan de actuación, y esperando -con inquietud ante la ausencia de participación ninguna- el proyecto y desarrollo del Presupuesto de la JCCM para 2016, cuya presentación y aprobación se demoró hasta bien entrado el año.

Nos resistimos a aceptar que los parámetros económicos marcaran las decisiones políticas y pedagógicas relacionadas con la Consejería de Educación. Esto es muy importante, porque invertir en educación es invertir en el futuro de las personas y de la región.

Pero conocidos y aprobados los Presupuestos, hubimos de enfrentarnos a una cruda realidad: la prioridad vuelve a ser el ajuste al techo de gasto y el pago de la deuda, mientras se relegan las partidas económicas precisas para recomponer la maltrecha enseñanza pública.

Así, el equipo de dirección de la Consejería esquivaba cualquier planteamiento de futuro, cualquier compromiso de diseñar y negociar un acuerdo de legislatura, con plazos y con presupuesto; y pretendía conformarnos para el curso 2016-17 con las medidas acordadas en mesa general para el conjunto de los empleados públicos.

El aumento de la tasa de reposición -y la consiguiente convocatoria de oposiciones de maestros y maestras en nuestra comunidad autónoma- fue la única noticia positiva; pero debida a una decisión del Gobierno Central que en todo caso es muy insuficiente para recuperar el empleo destruido durante la pasada legislatura.

Por lo que respecta a la actuación de nuestra consejería, sólo pudimos conseguir el cambio de la normativa sobre la elección del director o directora del centro escolar impuesta por el PP, para permitir una mayor participación del profesorado.

El reciente relevo al frente de la consejería nos permite, e incluso nos obliga, a recuperar la esperanza de tener en breve un calendario de negociación, más allá de las agendas de trabajo que hasta ahora se nos habían presentado.

Los recientes anuncios sobre bajada de ratios y supresión de la ‘zona única de escolarización’ para el curso 2016/17 suponen un apreciable cambio en la actitud de Gobierno Page respecto a la Educación, cambio al que se añade el propio ‘talante’ del nuevo consejero.

Pero seguimos sin tener claro el modelo pedagógico de esta Administración. Tenemos que revisar los horarios lectivos. Hay temas como el bilingüismo que siguen sin estar definidos. Esperamos medidas de calado que reactiven la FP. Necesitamos una apuesta clara por la Formación del profesorado. Hay que recuperar la contratación de los interinos durante todo el curso escolar, del 1 de septiembre al 31 de agosto…

Y seguimos necesitando, y urgiendo, una propuesta de negociación de un calendario de legislatura para revertir los recortes en la Enseñanza Pública, restituir los derechos de los docentes y del personal laboral de la consejería, garantizar los niveles de inversión que la situación requiere; y tomar impulso para rescatar el objetivo que se fijó nuestra región: destinar el 6% del PIB a Educación.

En materia educativa, el Gobierno Page ha suspendido su primer año. Nos gusta pensar que está decidido a recuperar desde ya mismo el tiempo perdido. Este verano puede y debe dar mucho de sí.

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