oretania.es · Hablar de Aceites Baos de Almodóvar del Campo es hacerlo de una empresa familiar con más de un siglo de andadura, que ha sabido acompasar su tradicional labor de almazara a las actuales técnicas de producción y todo con el delicado afán de satisfacer las demandas de sus clientes. De esta manera fue como, a principios de los años 90 del pasado siglo, empezó a ofrecer sus aceites vírgenes ecológicos. Bien, pues ahora ha dado un pasito más en esta línea de productos respetuosos con el medio ambiente y con la salud humana y de la mano de su nueva ‘Alacena Natural’ pone a disposición del público un amplio catálogo de productos saludables, libres de químicas artificiales o de modificaciones genéticas.
“Tenemos una gran variedad de productos ecológicos”, comenta Óscar León Baos, mentor de esta nueva firma. Y de hecho, así es: desde productos de alimentación infantil a embutidos varios como chorizo, salchichón, jamón, lomo; chocolates, mieles, azúcar de diferentes variedades; harinas, cereales, tés y demás infusiones; cervezas artesanas nacionales e internacionales, vinagres, sidras vascas y asturianas, cavas y gran reservas, vinos tintos de diferentes añadas;… Y, por supuesto, además de otras familias más de productos, no pueden faltar aquí aceites vírgenes extra de Baos.
Aunque es posible adquirir algunos de estos artículos en determinados establecimientos de alimentación genérica o grandes superficies, lo cierto es que la nota diferenciadora de ‘Alacena Natural’ es encontrar en un mismo espacio toda la gama que ofrece el mercado, sin perder tiempo buscando entre estantes donde se suelen ofrecer mezclados con productos tradicionales y a unos precios desorbitados, con márgenes que gravan sus costes hasta en un 80%.
León dice que “aquí no es el caso” y es que, aunque el género ecológico es algo más caro que el convencional con un porcentaje asequible de un 20%, “en ‘Alacena Natural’ los precios tienen unos márgenes lo más reducidos posible como vía para acercar los productos ecológicos al consumidor”. En todo caso indica que esa diferencia de precio radica en la forma de elaborar productos ecológicos, “que es más costosa que la convencional porque los productos químicos de síntesis como los fertilizantes ofrecen más rentabilidad con mayores producciones a menores costos“.
Por lo demás, “intentamos cubrir todas las necesidades que pueda tener cualquier persona de la comarca que quiera consumir un producto sano, saludable y que además tenga conciencia por la naturaleza porque éste es el objetivo último de este tipo de producción”. Como queda dicho, todo producto ecológico tiene su razón de ser en que, durante todo el proceso que sigue desde que se origina hasta que llega a la mesa del consumidor, no ha sido intervenido por ningún elementó químico de síntesis ni tampoco es transgénico. Eso también se nota en el paladar, porque “la forma de cultivar el campo o los manejos ganaderos que se usan en este tipo de producción al final repercute en sabores más tradicionales”.
Para garantizar estos procedimientos ecológicos, todos los productos, sean cárnicos, bebidas, frutas,… “todos tienen que tener un sello que especifica qué entidad certificadora está controlando y garantizando el carácter ecológico que los define y además se especifica si es de la Unión Europea o de fuera de este mercado”. Un férreo control que, como en el caso del aceite, obliga por ejemplo a Almazara Baos a recibir tres auditorías al año, una de ellas de carácter sorpresivo dado que no se avisa con antelación la visita de los técnicos‘
‘Alacena Natura’ cuenta con un amplio abanico de proveedores. De la comarca del Valle de Alcudia procede la miel o lomos de cerdo y ciervo o perdiz en escabeche. De Valdepeñas, los vinos. Patatas fritas ‘gourmet’ de Daimiel. Quesos de Poblete. Pero más allá de la provincia, hay género del resto de la región, de diferentes puntos del país e, incluso, de fuera de España y todo bajo el aval de las administraciones que velan por los legítimos intereses de los consumidores.
El concepto de establecimiento especializado en productos ecológicos que ofrece la familia Baos pretende ser trasladado a otros municipios de Ciudad Real y ya se está elaborando el portal web que posibilitará las compras de una manera cómoda desde casa. Pero es interesante que el cliente pise el recinto que la empresa ha rehabilitado en lo que fue parte de la zona bodeguera que la almazara también dedicara otrora a la producción de vinos.
El establecimiento se ubica a la entrada de la almazara, lo que resulta muy cómodo para el cliente y es fácilmente reconocible por el gran cartelón que preside su fachada. “Aquí dentro se quemaba el hollejo de la uva y, poco a poco, haciendo y desarrollando el proyecto de la tienda hemos encontrado arcos que hemos restaurado al igual que el techo”. Un espacio que, “con toda seguridad, pasa de los cien años y cuya labora de restauración nos ha resultado muy bonita”, refiere Oscar León Baos.
Luego el interior se ha decorado con elementos etnográficos del campo tradicional y, como referencia, un trillo hace las veces de mostrador. “Hemos sido cuidadosos, reciclando elementos que teníamos aquí y a los que ahora hemos sacado partido dando estos nuevos usos y una nueva vida”.
Con todo, bajo el aval de la experiencia de Aceites Baos, su tradición centenaria y su filosofía familiar, los amantes de lo ecológico tienen en esta zona de la comarca el primer y único espacio exclusivo de este tipo de productos de gran calidad y con unos precios muy competitivos. Se puede visitar de lunes a viernes de 8,00 a 14,00 horas y de 16,00 a 19,00 horas y los sábados de 9,00 a 14,00 horas.
