Los trabajadores de Tragsa han secundado hoy la segunda jornada de huelga convocada a nivel nacional para exigir la readmisión de los despedidos y la negociación de un plan de viabilidad con despidos cero.
A través del mayor ERE aplicado en una empresa pública en la historia de nuestro país, el Grupo Tragsa ha despedido a 555 trabajadores en el país, el 41,54% de las extinciones proyectadas en 2013, 47 de ellos en nuestra región, 31 de Tragsa y 16 de Tragsatec.
CCOO, la Federación de Construcción y Servicios y la Federación de Servicios siempre hemos defendido que el ERE del Grupo Tragsa no tenía sentido y no estaba justificado. El ERE se presentó en 2013, fue inicialmente anulado por la Audiencia Nacional y posteriormente autorizado por el Tribunal Supremo. En el momento de la aplicación las condiciones no eran las mismas que cuando se presentó.
El sindicato recuerda que la empresa cerró 2015 con 3,5 millones de beneficios, ha contratado a 1.200 eventuales en el último año y ha aumentado el 60% de su producción. Además, el Grupo Tragsa cuenta con unas reservas voluntarias de 261 millones de euros, y tiene pendientes de cobro 467 millones de euros que le adeudan distintas administraciones públicas.
Gracias a la movilización de los trabajadores, el Grupo Tragsa paralizó el ERE, un primer paso, pero ahora es el momento de que los trabajadores a los que se ha echado a la calle puedan volver a sus puestos de trabajo y que la empresa se siente a negociar con las organizaciones sindicales un plan de viabilidad con despidos cero. Pedimos la reversión de los despidos y una salida negociada que respete e impulse el sostenimiento y mantenimiento del empleo en la empresa pública.
Esta mañana todos los grupos parlamentarios de las Cortes de Castilla y León han aprobado, por unanimidad, la Proposición no de Ley (PNL) para instar a la Junta de Castilla y León a que pida al Gobierno de la nación a que trabaje por la readmisión de los 68 trabajadores despedidos del Grupo Tragsa en este territorio (555 en todo el Estado). La propuesta de resolución acordada por todos los grupos respondió a una PNL del PSOE. En la resolución se pide a la Junta, además de que trabaje por la readmisión de los 68 empleados despedidos, que inste al Gobierno de España a que solicite a la dirección de la empresa pública y a los representantes de los trabajadores y trabajadoras a entablar a la mayor brevedad posible las negociaciones necesarias para dar fin al conflicto laboral creado, lo cual debe pasar necesariamente por la readmisión de todas las personas despedidas durante el conflicto iniciado en 2013 en las mismas condiciones en las que se encontraban, toda vez que las causas económicas, productivas y organizativas que en su día justificaron el procedimiento de despido colectivo, se han visto modificadas.
En Castilla-La Mancha CCOO, UGT y los trabajadores de TRAGSA solicitaron también la tramitación en el Parlamento autonómico de una Proposición no de Ley que exprese el apoyo frente al ERE e inste al Gobierno estatal a retirarlo.