· Una institución cultural, como la Agrupación Musical de Argamasilla de Calatrava, es un tapiz que alberga en su seno pasado, presente y futuro, tramado en el conjunto del pueblo, sin clasismos.
Julio Criado · Argamasilla de Calatrava (Ciudad Real) · Para las fiestas de la patrona, hace 30 años, debutaba la ‘Agrupación Musical de Argamasilla de Calatrava’; alguien debió pensar que sería buen augurio esa coincidencia entre la música y la fiesta más preciada para los rabaneros. Nació colmada de espíritu y objetivos culturales: ensanchar el público aficionado a la música, formando públicos infantiles con escuela de educandos en la música y la formación de la correspondiente Banda de Música, que hizo su debut el 6 de Septiembre de 1987 y cosas del destino, el mismo 6 de septiembre, treinta años después, ha recibido una más que merecida Mención a la Cultura.
Y es que hoy, 30 años después, esos objetivos se han ido cumpliendo y la Agrupación es parte intrínseca de la vida cultural y artística de Argamasilla de Calatrava. Gran cantidad de conciertos de temporada, presencia en actividades escénicas y musicales, conciertos extraordinarios, estrenos y toda una panoplia de quehaceres que se han labrado paso a paso, pentagrama a pentagrama en esta treintena de años para ser, sin duda, la más importante institución cultural de Argamasilla.
No debemos de olvidar que una institución cultural es mucho más que un programa cultural específico o un evento espectacular, por importante que éstos sean; una institución cultural, como la Agrupación Musical de Argamasilla de Calatrava, es un tapiz que alberga en su seno pasado, presente y futuro, tramado en el conjunto del pueblo, sin clasismos.
Las bandas imprimen identidad sonora a plazas, avenidas y travesías como agrupación musical insignia de cada ciudad o pueblo a través de sus pasacalles, marchas, pasodobles y del eco de sus ensayos, mientras representan una opción fácil y muy recomendable para multitud de personas con inquietudes musicales que quieran iniciarse o perfeccionar la práctica de un instrumento. Tocar el saxo, la flauta travesera, la trompeta o cualquier otro instrumento en uno de estos grupos supone fomentar la cultura musical y educar a la comunidad en la apreciación de la dimensión artística entretanto se comparte, vive y disfruta con personas que poseen la misma pasión. Hacer música con otros produce sensaciones difícilmente descriptibles en palabras que alimentan el espíritu, bañan de sonido los recuerdos y proporcionan experiencias vitales de las que dejan huella.
Y es que ‘La Banda de Música de Argamasilla de Calatrava’ simboliza una de las vías más importantes de identificación de las expresiones culturales de este pueblo, que impulsa la participación comunitaria y que posibilita el encontrar opciones de vida y ocio para adultos, jóvenes y niños. También representa un proyecto artístico y educativo que ofrece oportunidades de formación, creación e interpretación musical a las nuevas generaciones, así como un marco común donde expresarse para aquellos aficionados más veteranos. Alrededor de ella se congregan los habitantes de la localidad y las familias de cada uno de sus integrantes, posibilitando el fortalecimiento del tejido social.
La formación de cualquier grupo de músicos requiere de un trabajo continuado durante años, siendo deseable que se muestren los resultados de forma permanente como aliciente para los intérpretes, que ven recompensado su esfuerzo de los ensayos, y como manera de enseñar su música y evolución a los vecinos. Con este objetivo pueden organizarse actuaciones periódicas en el marco de los diversos actos públicos, civiles y religiosos, así como conciertos y eventos culturales puntuales, permitiendo que la comunidad pueda constatar los resultados alcanzados y validar la existencia del trabajo musical de la banda. Además, con el avance del grupo y a través de encuentros entre localidades, cursos, festivales culturales o cualquier opción de interacción con otras bandas y grupos musicales, se abre la posibilidad a sus integrantes de confrontar el estado actual de su camino musical, promoviéndose un enriquecimiento y un desarrollo recíproco mediante espacios de intercambio y aprendizaje mutuo.
Ser parte de la agrupación no solo implica el orgullo de representar al municipio, sino que imprime un sello característico y único entre sus participantes al interior de la comunidad. Los músicos componentes de la banda deberán mantener un compromiso y seriedad con la misma, asistiendo regular y puntualmente a los ensayos y conciertos y siendo misión de el ‘Director’, apoyado por la ‘Junta Directiva’, fomentar un asociacionismo bien entendido para conseguir que, tantas personas distintas, cada una educada según sus parámetros y su manera de proceder, se unan en una idea común y se sientan parte de un único grupo, la banda de música, bajo su batuta e indicaciones.
Es necesario que todos nosotros, vecinos, instituciones, asociaciones, medios de comunicación, etc., demos nuestro apoyo al mantenimiento de la Agrupación Musical de Argamasilla de Calatrava, a un mantenimiento decidido, sin cicaterías, de auténtica política cultural, con mayúsculas, la que crea estructuras sólidas y no solo consumo cultural efímero, la que cree en proyectos a medio-largo plazo, la que apuesta por la solidez de los proyectos y no por la vaporosidad de sus manifestaciones, por espectaculares que éstas sean y renovemos nuestra ilusión por aquel proyecto que iniciara su andadura hace 30 años.
Permítanme que desde aquí exprese mis felicitaciones, destacando por encima de todo, a aquellos que llevan a sus hijos a la ‘Escuela de Música’ porque ello es el futuro y la cantera de la banda de música y a todos los músicos que acuden a ensayar, gracias a ellos las fiestas son más fiestas, porque qué triste es un pueblo sin banda de música. Un pueblo sin su banda de música es una sociedad huérfana de cultura y arte, de música.
Feliz Cumpleaños.
