Entrevista publicada en el periódico Apuntes, el periódico de Argamasilla de Calatrava
El 9 de abril del pasado año se producía el relevo en la Alcaldía de Argamasilla de Calatrava. Jesús Manuel Ruiz Valle sustituía a Jacinta Monroy al frente del Consistorio. Desde entonces, mantiene el proyecto de crecimiento para la localidad, al que aplica su impronta. Porque sin descuidar ese santo y seña tan propio del municipio, como es su amplio catálogo de servicios y apoyos para la ciudadanía de todas las edades y las familias, este experimentado edil, que llegó a la gestión municipal siendo muy joven, en tiempos de Fernando Calso, quiere dar un paso más. Su acción de gobierno persigue, entre otros objetivos, dar prioridad a una urbanidad de peatón.
– ¿Qué tal se maneja como alcalde? ¿Pesa la responsabilidad?
Bueno, es distinto. Desde abril a aquí es distinto porque asumes más y las decisiones que tomas al final repercuten en los vecinos de Argamasilla. Pero al fin y al cabo llevamos aquí dieciséis años donde hemos tomado muchas decisiones, donde hemos gobernado en tiempos buenos y en tiempos malos. Gobernamos una crisis, la del ladrillo en 2011 y hemos gobernado la crisis del COVID. También años buenos, como 2008, que luego acabó con el Plan ‘Zapatero’ gracias al cual pudimos hacer bastantes obras para mejorar infraestructuras de Argamasilla de Calatrava.
Ahora estamos en una época también complicada, en la que están subiendo precios, hay una guerra, estamos saliendo de la pandemia y creo que estamos gestionando con responsabilidad, con criterio y mirando por los vecinos. No somos de grandes obras ni de grandes infraestructuras, pero sí de las obras necesarias, de servicios e infraestructuras necesarias.
Y eso pesa, el tener que tomar decisiones cada día pesa, pero también es muy agradecido cuando vas por la calle y ves que algunas de las decisiones que has tomado los vecinos te las agradecen, pues la verdad que sientes que merece la pena estar aquí.
– Las pequeñas cosas en el día a día de un pueblo dicen mucho…
Sí. Si no es por esos momentos… La verdad que hay otros de soledad, en los que parece que algo va a salir mal y si no fuera por esas pequeñas cosas que haces por el vecino al que ves agradecido, sería más difícil. Por ejemplo, aquel que al fin ha podido trabajar tras hacer un curso en el Ayuntamiento que le valió para mejorar su currículum; otro que te da las gracias porque arreglaste una tapa que sonaba en su esquina; o un solar que has arreglado; o que su madre ha conseguido plaza en el Centro de Día después de una gestión de los servicios sociales… Pues es gracias a eso por lo que uno se levanta todos los días, se pone a trabajar, desde hace dieciséis años, y tiene muchas ganas de seguir haciéndolo.
– Y eso que llegó a este mundo de la gestión municipal casi sin esperarlo, muy joven como dice.
Así es, llegué con 24 años al Ayuntamiento tras ser el presidente de la Asociación Juvenil JORA, en la que trabajamos muchísimo por la juventud de Argamasilla de Calatrava. Y, bueno, he ido cambiando de áreas con el paso del tiempo. Empecé a llevar Juventud, Deportes, Educación, la Universidad Popular y ya en 2011 empecé a asumir más responsabilidades, en Obras. En 2015, Urbanismo, responsabilidades de gestión directa, primer teniente de alcalde, portavoz del grupo municipal…
Todo eso ha hecho que haya madurado con el tiempo y, como todo el mundo llegado este punto, creo que tengo una visión global del pueblo, donde me siento súper orgulloso y súper arraigado. Por eso, todo lo que hacemos es por mejorar nuestro pueblo, todo el equipo que encabezo piensa en eso, porque a todos nos gusta Argamasilla y queremos mejorar la vida de los vecinos que, al final, es para lo que estamos aquí. Entonces sí, ha cambiado un poco mi forma de ver las cosas. Con 24 años mirábamos mucho por unas actividades y ahora tengo esa visión más global de todo el pueblo y de todas las áreas del Ayuntamiento.
– Hablamos de la satisfacción vecinal, pero también del hecho de haber encandilado a otras personas que no eran vecinos y decidieron venirse a Argamasilla.
Cuando hablamos con otros alcaldes de la provincia, nos hablan de problemas de despoblación que, como tal, afortunadamente, no estamos sufriendo. Cada año crecemos en población, en gente joven que decide venirse a vivir aquí a iniciar un proyecto de vida y eso nos enorgullece.
Si de algo hemos estado orgullosos y hemos sacado pecho es de los servicios sociales, de la cantidad de servicios sociales que en Argamasilla se dan. Hemos sido incluso pioneros en servicios como Kanguras, que ahora el Gobierno regional tiene como Plan ‘Corresponsables’, pero nosotros ya veníamos desde el año 2011 dando este recurso. El comedor escolar, la ayuda a domicilio, comida a domicilio, Centro de Día… Tan amplio abanico de servicios hace que muchos vecinos de la comarca decidan establecerse en Argamasilla de Calatrava. También sus comunicaciones. Estamos muy bien comunicados con la capital Ciudad Real, con Puertollano y su estación de Renfe-AVE a cinco minutos, conexiones con Madrid, con Córdoba… Los dos colegios que son estupendos y tienen bastantes felicitaciones de la Consejería. El Instituto de Educación Secundaria, que ya los chicos pueden estudiar en Argamasilla de Calatrava hasta que acaban el Bachillerato. Y donde queremos dar un pasito más es en la Formación Profesional, pensando que es una buena opción para que alguien pueda terminar su etapa de estudiante aquí.
Todo este cúmulo de cosas hace que la gente elija nuestro pueblo para vivir y, en consecuencia, no perdamos población y sigamos creciendo. Entonces, estoy muy orgulloso de ese trabajo también.
– A nivel urbanístico, también se está evolucionando. ¿De qué manera?
Desde 2011 en que asumo la concejalía de Obras y luego desde 2015 en Urbanismo, tengo que decir que he podido trabajar con libertad, que tenía un proyecto de pueblo y que desde abril [de 2022] estamos llevando a cabo muchas de esas infraestructuras y obras que queríamos sacar adelante. El equipo entero, todas las concejalías, tienen claro el proyecto de ese urbanismo amable que queremos para Argamasilla. Queremos cambiar el concepto de plaza y de parque para que la gente disfrute de su pueblo y nosotros queremos dotarlo de medios para que así pueda ser.
Tenemos dos parques estupendos y tenemos otros en los barrios, estamos remodelando plazas y calles, con plataformas únicas para dar prioridad al peatón antes que al coche. Ese proyecto creemos que es bueno para el pueblo y queremos llevarlo a cabo, en los próximos meses hasta las elecciones y en la próxima legislatura. Es la línea que hemos empezado hace nueve meses y es una línea para mantener durante cuatro años y medio.
– La Plaza Palacios, la del Hortelano, es quizás la inversión más emblemática en este sentido. ¿Qué tal lo están recibiendo los ciudadanos?
Pues humildemente creo que se ha trabajado bien. Se ha explicado el proyecto, se ha empezado a ejecutar cuando tenía que ser, con todo el material disponible y sabemos que la obra no va a sufrir parones. Además, hemos hecho partícipes a todos los escolares de la localidad para que eligiesen el parque infantil que va a ir en la plaza, siendo el primero del centro del pueblo.
Era un proyecto que yo tenía en mente ya en 2015 y cuando tomé posesión como alcalde lo cité en el discurso de investidura. Lo tenía claro y, conseguidos los fondos gracias al Grupo de Acción Local del Valle del Alcudia, la obra avanza estupendamente y la tendremos acabada antes de Semana Santa. También con nuestra figura más emblemática, la que nos representa y nos hace sentirnos orgullosos, el Hortelano, que da sentido a nuestro gentilicio, al rabanero, como oficio de nuestros antepasados y del que nos queremos sentir orgullosos.
Y como queremos seguir mirando a ese pasado que nos define, para para poder mirar de cara al futuro, lo vamos a restaurar y a fundir en bronce gracias a la aportación de la Junta de Comunidades, a través de su Viceconsejería de Cultura. De manera que va a quedar un espacio del que todos los rabaneros van estar orgullosos, todos van a disfrutarlo y marcará nuestro punto de partida para lo que queremos en el resto del pueblo. Punto de partida en el que, como decía, vamos a priorizar al peatón antes que el coche, dotando a Argamasilla de espacios amplios y que se puedan usar.
– Otro motivo de orgullo y de identidad son las tradiciones, las fiestas, la cultura. ¿De qué manera se está revitalizando su vuelta a la normalidad tras la pandemia?
Pues la verdad que en Argamasilla de Calatrava es fácil, porque la gente tiene ese arraigo a sus tradiciones y a sus fiestas que, en cuanto hemos podido, el pueblo se ha volcado en recuperarlas y en poder celebrarlas. Y nosotros tenemos que estar a la altura, a través de las concejalías de Cultura y de Festejos, programando todo lo que se nos demanda y siempre innovando, siempre dando un pasito más allá.
En las últimas fiestas patronales tuvimos el tardeo joven, con las peñas, que resultó un éxito. Igual que un éxito resultó volver al parque, al recinto ferial y las noches de los conciertos, donde fue todo multitudinario. Pero también recuperamos San Isidro, que teníamos muchas ganas de ir a la romería. La Semana Santa, tras dos años en los que hemos tenido que ir con el pie puesto en el freno y por fin podemos disfrutarla como siempre lo hemos hecho. Las fiestas de barrio, tan importantes, con el conjunto de sus vecinos… San Antón que ya lo hemos celebrado, igual que los Santitos con su tradicional voto, San Blas, San Juan o la Virgen del Carmen. Son señas de identidad de los rabaneros que quieren salir a la calle a celebrarlo y a disfrutarlo con su gente.
Yo por mi parte tengo que decir que soy peñero y desde joven he estado en las peñas y disfrutando de las Fiestas Patronales en honor a la Virgen de Socorro. Me encanta ir a San Isidro, a las fiestas de barrio, disfrutar del Carnaval y de la Semana Santa, de la cual disfruto desde pequeño por tradición familiar. Y cuando se disfrutan las tradiciones, cuando las vives, es muy fácil poder organizarlas y poder sacarlas adelante. Entonces, no nos cuesta ningún trabajo e intentaremos seguir mejorando en todas las celebraciones.
– Antes hablábamos de la fundición en bronce del Hortelano, pero también el Gobierno regional ha declarado BIC la Sala de los Moros. ¿De qué manera se le quiere, o se le puede, sacar partido?
La Sala de los Moros era algo de lo que todo el mundo había oído hablar. Muchos sabían lo que era, otros no saben dónde está, pero lo habían escuchado y necesitábamos ponerlo en valor. Desde el equipo de Gobierno nos pusimos a trabajar en ello, con los problemas que se pueden tener cuando un bien de este tipo se ubica en una propiedad privada, pero se ha conseguido con la ayuda de todos.
Esto es mérito de Ángel, el monitor de senderismo; de Juan Carlos, el guía turístico; de David García, que le encanta el campo y siempre nos aporta alguna cosita más para que podamos seguir investigando; de nuestra aparejadora Patricia, que ha recabado mucha información y ha llevado el peso administrativo; de los informes de Germán, el arqueólogo… Un trabajo conjunto de muchas personas que han hecho posible obtener la declaración. También por la empatía absoluta de la viceconsejera de Cultura, Ana Muñoz, que se ha preocupado personalmente por el tema para sacarlo adelante.
¿Qué cómo afecta a Argamasilla de Calatrava? Pues creo que tenemos un bien único en la provincia y una vez tenemos esa declaración, debemos ser capaces de que se pueda visitar, de que la gente entienda que tenemos un tesoro y eso al final, cuando empiezas a recibir visitas e interés por parte de muchos ciudadanos, no solo de la provincia o de la región, sino probablemente del país entero, porque ya digo que es un monumento único, contribuirá a revitalizar toda la hostelería, hoteles, hostales que hay en Argamasilla, porque además tenemos mucho más que ofrecer.
Este BIC [Bien de Interés Cultural] solo es la guinda que le faltaba al pastel para que la gente venga. Venga a ver nuestros volcanes, pues estamos dentro del Geoparque y queremos ser una parte muy importante del mismo con la Laguna Blanca y el monumento del macizo volcánico. Venga a la Vía Verde del Trenillo, la más extensa de Castilla-La Mancha y además en un paraje espectacular como es la Sierra de Calatrava. Venga a visitar la Casa de la Inquisición, la iglesia de la Visitación de Nuestra Señora, el santuario de la Virgen del Socorro… Patrimonio y lugares que hacen que Argamasilla tenga un catálogo importante a ofrecer. La Sala de los Moros es ese bien estratégico que nos faltaba para que el visitante nos elija y pase un día, dos días o tres días aquí y le encante lo que se lleve.
– Al margen de lo que cuenta el alcalde de este amplio abanico de posibilidades para visitar, la forma en que lo dice denota un orgullo por su pueblo digno de destacar…
Hay gente que por desgracia tiene que salir para encontrar trabajo y se desplaza fuera, pero todo el mundo vuelve, ya sea con motivo de unas fiestas, por ejemplo, porque nos sentimos todos orgullosos de ser de aquí. Me encanta nuestro patrimonio, he intentado y he peleado mucho para que no se pierda ningún bien, por tener merenderos en el campo, por hace que en Argamasilla se viva bien y al final eso se nota. Se nota cuando uno se siente de un sitio. No hay mayor orgullo que sentirse de ese sitio y poder trabajar por mejorar tu pueblo. Creo que no debe de haber nada que se le parezca y ver que tus proyectos salen adelante, que la gente los reconoce y los disfruta, es uno de los grandes orgullos en la vida.
– De ahí ese celo también por la seguridad. En mente quedan casos muy desgraciados, puntuales y aislados u otros incidentes menores sucedidos. ¿De qué manera trabajan en potenciar recursos y medidas que garanticen la integridad de personas y bienes?
Desde que llegamos en abril, la idea siempre fue recuperar la plantilla de Policía Local, sus doce efectivos porque creemos que son los ojos, las manos y los oídos de la Administración local. Necesitan estar en la calle ante cualquier percance que sufra un vecino porque, si le sucede algo a las tres de la mañana, a quien llama es a la Policía Local. Incluso para atender incidencias menores como simplemente que esté lloviendo y una alcantarilla no esté tragando bien. Por esto y por más situaciones, queríamos recuperar los tres turnos de la Policía Local, tener cubierta la seguridad las veinticuatro horas del día, los siete días de la semana y en ello estamos trabajando.
Es verdad que es complicado conseguirlo tan pronto. No se pueden sacar doce plazas con un chasquido de dedos, porque la normativa obliga a cubrirlas una vez se producen bajas. Por eso, cuando un policía se jubila es cuando podemos sacar su plaza, lo que implica que hasta el año siguiente no se cubra. Pero estamos en el camino ahora con cuatro nuevos policías locales, dos mujeres que es algo de lo que también nos alegramos porque implica tener mayor igualdad dentro de un cuerpo que históricamente solo se ocupaba por hombres y nos hace entrar un poco en el siglo XXI en este sentido. Y luego profundizando en la coordinación con la Guardia Civil, con el capitán, con el sargento. Todos muy implicados para que Argamasilla no tenga problemas.
Entrando en lo que sucintamente se ha referido en la pregunta, es verdad que siempre hay algún percance que no se puede prever. Desgraciadamente tuvimos uno hace bien poco, donde perdimos a dos personas muy importantes para los vecinos de Argamasilla, a Alejandro y a José Luis y eso no lo vamos a olvidar. Eran gente nuestra, vecinos, Alejandro adoptivo y José Luis rabanero. Pero también digo que la gente de Argamasilla es muy fuerte y que va a seguir adelante sin olvidarnos jamás de ellos y honrando su memoria. Recordando la sonrisa de Alejandro, que nos empuja cada día a seguir trabajando conforme lo hacía él, con los chicos de los coles, cuando se ponía en la puerta siempre con una palabra agradable. Creo que todos sus compañeros van a seguir su ejemplo y eso nos va a hacer ser mejores personas. Exactamente igual con José Luis, porque durante la campaña de aceituna he podido hablar con su hijo y comentábamos alguna anécdota. Y en el campo creo que todo el mundo durante esta campaña lo ha recordado también, a él y su forma de trabajar.
– También es digno de alabar el hecho de que haya personas voluntarias que contribuyan a garantizar esa seguridad y a mantener el pulso de la solidaridad…
Argamasilla, y lo digo siempre, es amable y solidario. Aquí todo el mundo se implica, ya sea en una cuestación contra el cáncer donde se recaudan muchos fondos, en una recogida de juguetes con Protección Civil para las familias más vulnerables o cualquier tipo de actividad, ya no solo que requiera el Ayuntamiento, sino que requiera cualquier persona. Aquí todo el mundo se vuelca, todo el mundo es muy solidario y todo el mundo trabaja por el bien común.
Tenemos una Agrupación de Protección Civil muy potente, que no solo trabaja para Argamasilla de Calatrava, sino que da servicio a pueblos como Calzada, Aldea, Torrenueva, Puertollano, Almodóvar… Ellos se mueven mucho y colaboran, y eso, al final, nos hace sentirnos orgullosos, porque es lo que somos, cómo somos y poder extrapolarlo al resto de poblaciones nos hace ver la grandeza de nuestra agrupación.
Aquí y lo digo siempre y presumo de ello con el resto de alcaldes, aquí siempre habrá una palabra de ánimo, una palabra amable o una mano tendida si alguien lo necesita, porque los rabaneros y las rabaneras son así y eso es un motivo de orgullo que llevamos por bandera, no solo yo como alcalde sino todos los vecinos. Se pregunte a quien se pregunte dirá que Argamasilla es solidario y Argamasilla es amable.
– Estamos tocando muchos temas, en los que el alcalde no está solo. ¿Qué valor concede a sus compañeros de equipo de Gobierno?
Absolutamente imprescindibles todos. Aquí es un equipo de verdad, que yo encabezo. Un equipo con Sergio [Gijón] al mando de los servicios sociales, trabajando veinticuatro horas; José Antonio [García], en obras con una visión estratégica del pueblo; Estela [Céspedes], en cultura, de la que es una apasionada; Jacinto [Arriaga], en deportes, con una gran implicación en las actividades; Ana Belén [Sáez], en promoción empresarial, siempre al servicio del pequeño comercio; Soco [Letrado] y Víctor [Ruedas], en igualdad, con un trabajo incansable. Es un equipazo y sin ellos no seríamos lo que somos, ni cómo estamos. Si Argamasilla está bien, si Argamasilla funciona bien, y así nos lo reconocen desde otras instituciones como la Diputación Provincial o la Junta de Comunidades, es gracias a este equipo. Tienen una sensibilidad brutal, una manera de trabajar sin fisuras, todos por el bien común, sin interés ninguno y para mí son primordiales. No podría estar sin ellos y, afortunadamente, creo que casi todos van a seguir en la próxima legislatura.
– ¿Y cómo valora a la oposición municipal?
Cada uno dentro de sus ideales, los trece concejales de Argamasilla de Calatrava, trabajan por mejorar la vida de los vecinos. No creo que ninguno, ni del equipo de Gobierno ni de la oposición, piense en tener un beneficio propio o perjudicar a la gente. Entonces, siempre son bien atendidas las propuestas que nos hacen. Nosotros intentamos ser transparentes, darles toda la información que podemos, incluso más allá de lo que la ley nos exige y trabajamos con ellos. Durante los plenos y en comisiones analizamos todas sus propuestas y ellos tienen mi teléfono, me pueden llamar cuando quieran, que no hay mala relación.
¿Somos adversarios políticos? ¿Tenemos diferentes ideas? Evidentemente, pero no somos enemigos. Con el portavoz del PP es una comunicación directa. Con los portavoces de Izquierda Unida y de Ciudadanos, exactamente igual. Si ellos tienen algún problema, si ven algo que no les gusta, me llaman y me lo dicen. Hay una comunicación y un respeto que, creo, es básico para el buen funcionamiento del Ayuntamiento. La crispación no lleva ningún sitio. Aquí los cuatro grupos municipales tenemos un bien común y ahora mismo nos toca gobernar a nosotros, pero todas las propuestas que hagan, evidentemente son por mejorar la vida de los vecinos y bienvenidas sean. Algunas se pueden llevar a cabo y otras no.
– ¿Y hasta qué punto son para el Ayuntamiento importantes las aportaciones de la Diputación y de la Junta en tantísimos proyectos?
Primordiales. La Diputación, con José Manuel Caballero a la cabeza, está súper involucrada en el desarrollo local, no solo en Argamasilla de Calatrava, sino con todos los municipios. Tengo que hablar de nosotros porque gracias a la Diputación hemos podido adquirir bienes que a corto plazo serán muy importantes culturalmente, como el Cine ‘Don Quijote’ y la Bodega de Eladio López. Gracias a fondos de la Diputación vamos a poder acabar la obra del antiguo cine y su Plan de Obras nos ayuda mucho. Cualquier cosa que proponemos ahí está la Diputación para financiarlo y llevarlo a cabo. Recientemente hemos cambiado 1.234 bombillas LED gracias a fondos que gestiona la Diputación Provincial, lo que conlleva un gran ahorro al municipio.
Para nosotros la Diputación es fundamental, igual que la Junta. Desde todas las consejerías el apoyo es constante. El Plan de Empleo de la Junta de Comunidades es vital, ya no solo por dar trabajo, sino también porque nos mejora la limpieza del municipio y pequeñas obras que podemos hacer al dotarnos de personal para ello. Pero también su implicación con el Plan Corresponsables, el Centro de Día, Ayuda a Domicilio, en la propia Residencia de Ancianos con sus plazas concertadas…
Creo que el apoyo de estas Administraciones y con la sensibilidad con la que las están gobernando José Manuel Caballero y Emiliano García-Page, hacen que los pueblos crezcan, pero especialmente crezca Argamasilla de Calatrava.
– Jesús Ruiz ya ha mostrado su disposición a recibir el refrendo de sus paisanos como alcalde, por primera vez en las urnas. ¿Por qué ese paso?
Cuando hace diez meses di el paso de hacerme cargo de la Alcaldía de Argamasilla de Calatrava, lo hice no para trece meses, lo hice pensando a largo plazo. Me presento a las elecciones porque me gusta mi pueblo. No hay más. Me gusta trabajar por mi pueblo e intentar que las cosas vayan bien, que la gente esté orgullosa de vivir aquí y de que elija Argamasilla de Calatrava para vivir, para que el pueblo no se muera. Ahora que está en boca de todos el tema de la despoblación y vemos como otros municipios de la provincia los están sufriendo, nosotros nos levantamos cada día para intentar que Argamasilla siga viva, para que Argamasilla no se muera y para para que tenga no solo los mejores servicios sino también las mejores infraestructuras, los mejores recursos… Es lo que nos mueve a seguir adelante y es lo que me mueve a intentar seguir aquí a partir de mayo que son las elecciones. Y de una manera u otra seguiré trabajando por Argamasilla de Calatrava.
– ¿Cómo se define a sí mismo?
Estos días también me preguntaban eso y yo decía que, bueno, soy una persona normal, con muchas inquietudes desde muy pequeño, con ganas de hacer cosas, pero con una vida muy normal. Salgo con mis amigos, me gusta disfrutar del pueblo, comprar en el pueblo, hacer vida en Argamasilla de Calatrava y yo creo que ésa es la palabra: normal. Como bien digo, desde bien pequeño tengo la necesidad de implicarme por mejorar la sociedad, fuera primero en la asociación juvenil o luego en el Ayuntamiento, siendo como fui monitor deportivo en las Escuelas Deportivas, dando clases de informática en los colegios a niños, en el Centro de la Mujer o en el Centro de Día. Siempre he estado muy implicado por mejorar las cosas, pero dentro de una normalidad y con sensatez y, como dice un alcalde al que aprecio mucho, con sentido común que es lo que debemos hacer primar.
– Por cierto, como fotógrafo amateur se ve que también le gusta sacar el mejor perfil a éste, su municipio…
Intento disfrutar de mis aficiones dentro del poco tiempo libre del que dispongo. Me gusta mucho jugar al pádel pero también salir los domingos en bici y, efectivamente, me gusta mucho la fotografía. Y la verdad, cuando se juntan todas estas aficiones, como el montar en bici, con 234 kilómetros de caminos públicos y hacer fotografía, con tanto patrimonio natural y tanto patrimonio turístico, al final, para mí, Argamasilla de Calatrava es el sitio ideal donde poder desarrollar lo que me gusta, además de vivir.
