Toledo · El portavoz del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha, Francisco Cañizares, ha asegurado que “Page y Podemos han cerrado ya un pacto presupuestario oculto para 2017 que está lejos de servir a los intereses de nuestra región, porque la finalidad real de este acuerdo será taparse mutuamente las vergüenzas. Según ha indicado Cañizares en rueda de prensa, que lejos de estar preocupados de los problemas de los castellano-manchegos, Page y Podemos juegan con los verdaderos intereses de nuestra tierra para evitar problemas internos en sus formaciones políticas. En este sentido, ha señalado que la hoja de ruta que están trazando pasa por que el PSOE presente unos presupuestos en solitario que posteriormente sean apoyados por los diputados autonómicos de la formación morada.
A diferencia del teatrillo que escenificaron para la presentación del acuerdo de tres folios que hicieron para los presupuestos de 2016 –ha proseguido- PSOE y Podemos ahora no van a aparecer juntos porque así lo prefieren, pero han sellado un acuerdo que no cumple con los compromisos a los que ambos se comprometieron.
Además, Cañizares ha recordado que la condición de Podemos para apoyar las cuentas públicas de 2017 era aprobar el Proyecto de ley integral de garantías antes de los presupuestos, “algo que va a ser imposible llevar a cabo y de lo que es perfectamente consciente Podemos”.
“A ver cómo hacen el paripé los de Podemos para apoyar unos presupuestos sin traer antes un proyecto de ley en el que aparezcan los informes técnicos, económicos y jurídicos”, porque lo que probablemente hagan sea traer a las Cortes una proposición de ley, que sería una mera declaración de intenciones y significaría una traición para los intereses que dicen representar los diputados de esta formación.
En este punto, ha asegurado que García Molina está entregado al PSOE, lo que le está provocando problemas en su partido.
A juicio del portavoz, los presupuestos que esta horneados y cocidos entre Page y Podemos, y recogen la relajación y pérdida de controles presupuestarios, como ocurrió hasta 2011 con el Gobierno de Page, Barreda y Araújo, cuando dejaron nuestra región con una situación terrible en lo económico y en lo financiero.