Olmedo reivindica la unidad, el progreso y el punto de encuentro que caracterizó la aprobación de la Constitución Española en 1978

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Carmen Olmedo - Dia de la Constitucion 3Ciudad Real · La delegada de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en la provincia de Ciudad Real, Carmen Olmedo, ha reivindicado para el momento actual los valores y bondades que caracterizaron la aprobación de la Constitución Española en 1978, como fueron el diálogo, la concordia, la unidad y la generosidad.  En este sentido, Olmedo considera que “es una obligación para los representantes públicos de hoy, como lo fue para los de ayer, trabajar, no ya para el mantenimiento de ese consenso constitucional, sino para conseguir ampliarlo”.

Un “punto de encuentro” por el que a su juicio “merece expresar el reconocimiento y admiración de todos los que lo hicieron posible”, pues ha marcado una trayectoria enriquecedora y de progreso, de libertad y democracia durante casi cuatro décadas en la Historia reciente de España.

Consciente de que “la realidad de hoy nada tiene que ver con la existente allá por el año 1978” y que “la democracia ha de ser algo dinámico para adaptarse al paso del tiempo y avanzar hacia mayores cotas de bienestar”, la máxima representante del Gobierno de Castilla-La Mancha en la provincia de Ciudad Real ha abogado por imitar ese gran consenso del pasado para actualizar la Carta Magna e “ir escribiendo el presente y el futuro, siempre, claro está, mediante los procedimientos legales previstos a tal efecto”.

Una “política con mayúsculas”

De hecho, Olmedo ha manifestado que “más allá de las legítimas discrepancias”, la ciudadanía está pidiendo una “política con mayúsculas” con la que avanzar en un claro compromiso por la apertura y la transparencia “como mejor antídoto frente a los riesgos de la incomprensión y la desconfianza”.

Por encima de divergencias y dificultades, la delegada de la Junta de Comunidades ha asegurado que “lo esencial es seguir trabajando día a día por nuestra Constitución, que es lo mismo que trabajar por la ciudadanía”, a la postre, el leitmotiv del Gobierno de Castilla-La Mancha así como del resto de administraciones representadas en este acto.

Sin restar valor a ninguno de los derechos fundamentales y libertades que recoge la Constitución Española, Olmedo ha destacado en esta ocasión el artículo 35 que dice que ‘todos los españoles tienen el deber de trabajar y el derecho del trabajo (…)’. “Lo digo con conocimiento de causa, pues sé que la falta de trabajo es el principal problema que sufren los ciudadanos y ciudadanas, como también tengo claro que las políticas de empleo son la prioridad absoluta del Gobierno de Castilla-La Mancha en leal colaboración con las diputaciones provinciales y los ayuntamientos, como no puede ser de otro modo, buscando siempre el mayor bienestar y calidad de vida de los ciudadanos”.

Homenaje “plenamente justificado”

Por todos estos motivos, Olmedo entiende que el homenaje que hoy se rinde a la Constitución Española está “plenamente justificado” si se tiene en cuenta que “ha brindado a nuestro país el periodo de estabilidad democrática más prolongado”, pero es que, además, “ha propiciado que España alcance cotas de progreso y bienestar homologables a las de las regiones más prósperas de Europa”.

Y qué mejor ocasión que ésta “para renovar nuestra adhesión y lealtad a la Constitución y abogar por su fortaleza y vigencia, pero también para comprometernos a divulgar y dar a conocer los valores constitucionales a las generaciones más jóvenes”, ha apuntado Olmedo en alusión y felicitación a las alumnas y alumnos premiados por su trabajos literarios y artísticos relacionados con esta efeméride.

Palabras de felicitación y también de agradecimiento a todas las personas presentes han cerrado la intervención de Carmen Olmedo, entre ellas, la alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora; el presidente de la Diputación de Ciudad Real, José Manuel Caballero; el subdelegado del Gobierno de España en funciones, José Antonio Nuevo; los ex presidentes de Castilla-La Mancha y de la Diputación Provincial, José María Barreda y Nemesio de Lara, respectivamente; así como una amplia representación de parlamentarios regionales, diputados provinciales, alcaldes, alcaldesas y concejales llegados desde distintos puntos de la provincia.